El gazpacho de melón es una delicia.

Un lugar encantador pero ruidoso

La atención del personal fue excepcional. siempre amables y dispuestos a ayudar. La comida en el bar era deliciosa y el ambiente del pueblo es pintoresco, ideal para desconectar.

Sin embargo, nuestra habitación era ruidosa, especialmente por los portazos durante la noche, lo que dificultó el descanso. Además, necesitaría algunas reformas para mejorar la experiencia.

el Mijares en Olba es un lugar curioso, pero las habitaciones son tan ruidosas que pensé que estaba en una fiesta sin fin, además, ni un cartel pidiendo silencio. También, desde luego, me dejaron en una habitación pequeña y esperaba un humilde gesto de bienvenida, como un upgrade de habitación, pero no, sólo decepción.

un pequeño paraíso donde la comida y la atención del personal son espectaculares

El Mijares en Olba me sorprendió con su cocina deliciosa y la amabilidad del dueño, que te hace sentir como en casa. Además, la conexión wifi fue muy útil y el ambiente tranquilo, ideal para descansar.

El alojamiento cuenta con habitaciones económicas que se ajustan al precio. La entrada del pueblo está a solo cinco minutos andando, aunque el acceso en coche es complicado por las calles estrechas, lo que lo hace más tranquilo.

Pasé una noche en julio y el calor en la habitación era insoportable sin ventilador. con la ventana abierta, el ruido de grupos de jóvenes me despertó hasta altas horas. Además, la falta de limpieza adecuada se notó en el suelo, que tenía pelos de animal y productos usados de huéspedes anteriores, lo cual resulta decepcionante en tiempos de pandemia.

Menuda sorpresa! Cuina deliciosa i un tracte molt calid. Ideal per desconnectar, amb un ambient tranquil i vistes espectaculars. El google maps no t'hi ajuda gaire, però paga la pena el viatge. Recomano fer un bon passeig pels voltants!

La habitación era amplia, pero el ruido exterior no me dejó descansar.

una experiencia maravillosa en el mijares donde disfruté de una comida deliciosa en el restaurante y el ambiente tranquilo del pueblo. la habitación era amplia y tenía un pequeño balcón con vistas preciosas a las montañas. es ideal para pasear y explorar los alrededores.

la conexión wifi puede mejorar 📶.

la comida estaba deliciosa y el dueño fue muy amable. el acceso al hotel es complicado.

El Mijares en Olba me sorprendió gratamente. La comida en el restaurante es deliciosa y destaca la amabilidad del dueño, que realmente te hace sentir como en casa. Además, la conexión wifi fue muy útil y el ambiente tranquilo del lugar es ideal para descansar después de un día de trabajo.

El acceso al hotel es un poco complicado.

La comida del restaurante es increíble y muy sabrosa. El ambiente es relajante y perfecto para desconectar. La atención del dueño fue cálida y amable. La conexión wifi funciona bien. Las vistas desde el balcón son impresionantes. Volveré sin duda. 😊

La comida es increíble y el personal te hace sentir como en casa. El entorno es genial para pasear y desconectar por completo.

Una cosa a mejorar sería la señalización para el check-in, que podría ser más clara.

Reservé una habitación doble con baño privado y aunque el sitio tiene un encanto, la limpieza dejó mucho que desear. Al llegar, el suelo estaba sucio y había restos de productos usados. Esto fue decepcionante, especialmente considerando que estamos en tiempos de pandemia. Sin embargo, la comida en el restaurante es excelente y muy recomendable, lo mejor del lugar. La habitación era espaciosa y tenía un balcón con vistas a la montaña, lo que hizo nuestra estancia más placentera. Además, el pueblo es tranquilo y agradable para pasear. Una cosa a mejorar sería el acceso a la cena entre martes y jueves, ya que no hay muchas opciones. En general, el servicio fue muy bueno, especialmente Iván, que se mostró muy atento. A pesar de los problemas de higiene, la atención y la comida compensaron un poco la experiencia. Tal vez regresaré si se mejoran estos detalles.